Londres, 6 ene (Prensa Latina) Los abogados de Julian Assange pedirán hoy su libertad bajo fianza, después que una jueza británica se negó a extraditarlo a Estados Unidos por considerar que el fundador de WikiLeaks podía suicidarse en una cárcel norteamericana.
El equipo legal del periodista australiano tendrá, sin embargo, que convencer a la jueza Vanessa Baraitser de que su cliente no se saltará la libertad condicional, como hizo en 2012 cuando era investigado por la justicia sueca por presuntos delitos sexuales y decidió asilarse en la embajada de Ecuador en Londres.
Tras ser arrestado en la legación diplomática ecuatoriana en abril de 2019, Assange fue condenado a 50 semanas de cárcel por ese delito, y luego la magistrada decidió que el ciberactivista debía permanecer en prisión hasta la conclusión del proceso de extradición debido a su «historial de fuga».
Se espera, no obstante, que la defensa del fundadori6ļrķuppúuphx de WikiLeaks invoque los nuevos lazos familiares forjados por su cliente, quien durante su permanencia en la embajada ecuatoriana procreó dos hijos con su compañera Stella Morris, por lo que permanecería en Londres junto a su familia.
Estados Unidos quiere extraditar a Assange para juzgarlo por 17 cargos de espionaje y uno de conspiración para cometer piratería informática, que en total conllevan una sentencia máxima de 175 años de cárcel.
Las acusaciones tienen como base la publicación en WikiLeaks de miles de archivos secretos que pusieron al descubierto crímenes de guerra cometidos por las tropas norteamericanas en Iraq y Afganistán, y valoraciones comprometedoras hechas por diplomáticos del Departamento de Estado sobre gobiernos y líderes políticos extranjeros, entre otros documentos.
Aunque estuvo de acuerdo con la mayoría de los cargos presentadas por la fiscalía estadounidense y rechazó el alegato de la defensa de que el caso tiene motivaciones políticas, la jueza británica aceptó la opinión expresada por varios psiquiatras y psicólogos durante el juicio de que Assange sufría de depresión, por lo que existía el riesgo de que atentara contra su vida de ser entregado a Estados Unidos.
Los fiscales norteamericanos ya anunciaron que continuará buscando la extradición, y un portavoz del Departamento de Justicia dijo que estaban «extremadamente decepcionados» con el veredicto de Baraitser, por lo que apelaran el fallo ante el Tribunal Superior de Londres, lo que significa que el caso de extradición estará en los tribunales del Reino Unido durante meses.